22-01-09 En la jornada de ayer, la frágil memoria de los magistrados actuantes durante el autodenominado Proceso de Reorganización Nacional debió ser ayudada por las preguntas de la querella y la lectura de los documentos de la época, que ellos alguna vez firmaron.
De allí se desprendió que existió una estructura judicial cómplice, por acción u omisión y que los jueces no desconocían lo que ocurría en ese tiempo en que el Estado imponía el terror.
Eduardo Allende, ex Juez Federal de San Luis y Alfredo Rodriguez, Juez del Crimen designado por el brigadier Marcilese, fueron los citados a declarar como testigos en la causa que se investiga el asesinato de Graciela Fiochetti y la desaparición de Santana Alcaraz y Pedro Ledesma.
Por las manos de Allende pasó el famoso "sumario 22" en donde están consignadas las actuaciones que se realizaron luego del hallazgo de los dos cuerpos que estaban en las Salinas del Bebedero, uno de los cuales fue identificado como el de Graciela Fiochetti. Ayer reconoció su firma devolviendoselo al Comando de Artillería sin tomar ninguna actuación. Ya sea por tratarse de delitos de la subversión o por ser un secuestro seguido de muerte, tenía competencia en el caso. Pero no hizo nada o si lo hizo fue para que no se descubriera.
Allende había pedido el expediente porque tenía en sus manos la denuncia del padre de Domingo Chacón, que buscaba el paradero de su hijo que aún hoy continúa desaparecido. pero luego de corroborar -sin decir como- de que lo que buscaba no estaba en el "sumario 22", se lo devolvió al Comando de Artillería, por entonces al mando del coronel Miguel Ángel Fernandez Gez, desvinculándose de un caso que era de su competencia.
También olvidadizo como el resto de los que ocuparon funciones públicas en ese período, Alfredo Rodríguez debió reconocer las reuniones de las que participó junto al entonces fiscal Raúl Fourcade y el ya conocido como el "fiscalíto" (Jesús) Rodríguez, junto a personajes como Roberto Arce y el torturador Jorge Hugo Velazquez, que fue quien involucró a Carlos Pla en el fusilamiento de Graciela Fiochetti.
Aunque ayer se haya encargado de descalificarlos a los condenados por el crimen de Diego Funes, Rodríguez, con su testimonio avaló parte de la declaración de Velazquez de 1986. El trato que se dispensaban el entonces juez, los fiscales y los servicios de inteligencia, eran tal como los describía Velazquez.
Hoy el diario Página 12, en una nota escrita por Diego Martinez, toma cuenta de lo sucedido en aquellos días en San Luis. El artículo se titula "Las cuentas pendientes de la Justicia".
Informe: Gustavo Senn
gustavosenn@gmail.com
Free counter and web stats
jueves, 22 de enero de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario